lunes, 8 de abril de 2013

Tiempo.

Hay ocasiones en la vida que se junta todo el jaleo y parece ser que el último año ha decidido ser una de esas ocasiones. 
Últimamente siento más la necesidad de escribir y de dibujar, lo echo de menos, además de leer y actuar. Parecerá mucho, pero siempre he disfrutado de estas cosas y algunas más.
Casi todo mi tiempo se va en el transporte. Maldito, y bendito a la vez, transporte público de Madrid.
Por eso, si alguien está trabajando en una máquina de la que se pueda obtener más tiempo, yo invierto en ella, aunque claro, esto siempre ha sido una de las mayores preocupaciones de la gente; el tiempo. Cierras los ojos un segundo y al abrirlos ya ha pasado ese momento, irrepetible e irrecuperable. Por eso, estés haciendo lo que estés haciendo hay que aprovechar ese instante, saborear la vida (aunque estés en un atasco entrando en Madrid).


PSD.